Si quieres presumir de bronceado bonito pero a la vez sano, los expertos en belleza recomiendan preparar la piel con estos pasos.
Exfoliación
Una vez a la semana exfolia la piel del rostro y del cuerpo con un producto específico. La exfoliación te ayuda a eliminar las células muertas, limpiar la piel en profundidad y prepararla para el sol. Importante: no frotes muy fuerte, aplica el gel exfoliante y masajea con suaves movimientos circulares, tanto la piel de tu rostro, como la de tu cuerpo. El verano está cada vez más cerca y seguro que quieres lucir ese tono tostado tan favorecedor… Pero con el sol hay que ser prudentes y no poner en riesgo nuestra piel ni nuestra salud. ¡Te contamos cómo!
Si quieres conseguir un bronceado bonito y más duradero, puedes recurrir a la nutricosmética. Ojo, no se trata de sustituir las cremas protectoras de sol. La nutricosmética es un complemento al protector.
Hidratación
El sol seca mucho la piel, así que es fundamental hidratarse por dentro y por fuera, antes, durante y después de tomar el sol. Bebe abundante líquido, sobre todo agua, y zumos naturales. E hidrata tu piel a diario, después de la ducha.
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